lunes, 15 de agosto de 2016

Reseña: Dile a Marie que la quiero, de Jacinto Rey

Vuelvo a la novela para adultos con la reseña de Dile a Marie que la quiero, una preciosa y dura novela de Jacinto Rey, ambientada en la Segunda Guerra Mundial. Editada por Suma de Letras, del grupo Penguin Random House, esta novela se publicó el pasado mes de junio.


SINOPSIS
«Entonces reparó en Mathilde [...]. Le bastó una ojeada para saber que no podría hacer nada por ella. Mathilde movió un brazo con dificultad, sacó una fotografía del bolsillo y susurró:-Dile a Marie que la quiero.Paul acarició sus cabellos, guardó el retrato de la niña y besó el rostro de Mathilde. A partir de ese momento, nada volvería a ser como antes.» 
Jacinto Rey hilvana una novela que muestra un tapiz de historias protagonizadas por seres humanos golpeados por una guerra que los pone al límite. Acción y emoción se dan la mano para dar sentido a unas palabras que son el motor de una búsqueda, de una posible salida al horror. Dile a Marie que la quiero es una novela magistral, muy bien documentada, que recrea una época convulsa, llena de luces y sombras, para encender la llama de la esperanza en medio de la oscuridad. La mirada y el estilo de Jacinto Rey y su habilidad para construir tramas que nos transportan en un viaje laberíntico a momentos críticos de la historia, especialmente duros, no han pasado desapercibidos por los editores internacionales que ven en Rey atisbos del mejor Ken Follett, Tatiana de Rosnay o Marcus Zusak.
COMENTARIO

Parece difícil que una historia tan desgarradora como Dile a Marie que la quiero sea al mismo tiempo una novela tierna, cargada de dulzura y esperanza. Y es que esta es una novela dura y viva, con mucho que contar y donde se muestran dos facetas muy distintas del ser humano: el perdón y la venganza.

Dile a Marie que la quiero nos cuenta la historia de Mathilde y Erik. Ella es una joven de familia adinerada, él, un actor judío en paro. Entre ellos surge el amor y ambos se ven acorralados en una Alemania nazi donde los judíos empiezan a ser masacrados o trasladados a campos de concentración. Ahí los tenemos. A ellos y, poco después, a su hija Marie, que se convierte en el centro de la historia. Por otro lado, nos encontramos con otros personajes, otras historias que parece que no tienen nada que ver con la de Mathilde y Erik pero que, a medida que va avanzando la historia, van hilándose en la misma trama que consigue ser un tejido fuerte y sostenido.

El lenguaje sencillo de Jacinto Rey hace que esta historia cargada de referencias históricas y con más información de la que podría parecer, se entienda a la perfección. El lenguaje es directo y la narración y la técnica están muy bien desarrolladas, forjando una historia que no deja cabos sueltos. Además, el estilo de Jacinto Rey le permite ser muy versátil y tomar muchos puntos de vista para irte metiendo en la historia y evitar la monotonía. Esta es una novela 100% dinámica, rápida y directa.

Aunque haya algún personaje del que haya echado de menos saber más, los personajes de Dile a Marie que la quiero me han parecido muy creíbles, realistas y bien construidos. En una época como en la que se desarrolla la historia me ha parecido muy coherente encontrar personajes que se dejan llevar por la ira, otros por la venganza y otros que prefieren ayudar a los que lo necesitan más. 

Los temas que a mi modo de ver trata la novela son el amor, la venganza, la locura de un nacionalismo extremo, la compasión, el miedo y la esperanza. Todo ello en un vertiginoso batiburrillo de historias que se entrelazan formando un todo consistente y sólido.

Para terminar, debo decir que ésta ha sido una de mis lecturas favoritas en lo que llevo de verano. Tanto si te gustan las novelas de la época de la Segunda Guerra Mundial como si no has abordado antes esta ambientación, Dile a Marie que la quiero te gustará, porque tiene de todo y puede ser atractiva para casi cualquier público. Yo la empecé con miedo, pensando que no me gustaría, y al final he de reconocer que la he disfrutado mucho.